Operadoras de todo el mundo se centran en redes WiMAX
El objetivo es permitir a las empresas de telecomunicaciones ofrecer servicios de banda ancha a través de redes inalámbricas en lugares hasta ahora inaccesibles.
Trece operadoras de todo el mundo están desplegando las primeras redes WiMAX fijas del mundo – desde Alemania a Guatemala -basadas en tecnología de Intel, para ofrecer acceso de banda ancha de alta velocidad a empresas y áreas residenciales. Así mismo, otras once operadoras más se están preparando para desplegar redes WiMAX adicionales, basadas también en tecnología de Intel, a finales de año.
Las operadoras han comenzado a realizar despliegues comerciales de este tipo de redes, tanto en ciudades como en zonas suburbanas y rurales, para permitir a las empresas de telecomunicaciones ofrecer servicios de banda ancha a través de redes inalámbricas en lugares donde, hasta ahora, resultaba imposible o muy caro ofrecer este tipo de servicio.
“A medida que la tecnología WiMAX se impulse gracias a los despliegues comerciales de esta clase de infraestructuras, los hogares y las empresas van a salir ganando con la facilidad y el potencial que ofrece la conectividad inalámbrica rentable”, afirma al respecto Scott Richardson, director general de la división de banda ancha inalámbrica en Intel.
Estas instalaciones ofrecen soporte a diversos servicios, que van desde el acceso básico de alta velocidad para los hogares, a la telefonía por Internet, la conectividad empresarial y el apoyo a escuelas y oficinas gubernamentales. Además, estos despliegues están aprovechando el impulso que está experimentando la disponibilidad generalizada de la tecnología WiMAX, incluyendo la promesa del gobierno de Taiwán de invertir 37.000 millones de dólares taiwaneses (1.120 millones de dólares) en iniciativas móviles relacionadas con esta solución, y la campaña de banda ancha en Asia puesta en marcha por Intel, una iniciativa diseñada para estimular el desarrollo de la tecnología WiMAX en el Sudeste de Asia y en la que Intel colabora con los gobiernos, los reguladores del sector de las telecomunicaciones, las agencias del sector público para educación, sanidad y agricultura, y las operadoras de la región.