Probamos el LG Secret [veredicto: shhhhhhh!!!]
En su favor hemos de decir que las fotos de estas vacaciones (¿ah, pero ha habido vacaciones?) han salido con una resolución magnífica gracias a la cámara de 5 megapíxeles que tiene el teléfono, que definitivamente te permite olvidarte de llevar la cámara tradicional y confiar en la del móvil, incluso para tomas con poca luz, pues tiene flash. De noche, mejor no usar el móvil.
El teléfono –que también puede ser usado como reproductor mp3, con gran capacidad de almacenamiento de archivos, con memoria interna de 100 mb y ranura para tarjetas SD- sobresale sobre todo por su elegancia y diseño, que se percibe en la propia caja del mismo y, sobre todo, por su pantalla, táctil como se lleva ahora en cuestión de telefonía, que permite un uso muy sencillo de los menús interactivos (fotografías, música, juegos…)
Las teclas permanecen escondidas hasta que se las presiona, cuando se ponen de color azul (apostamos que de ahí le viene el nombre al teléfono). De todas formas, aquellos a los que no les guste tocar la pantalla, porque, si, un poco se ensucia, pueden seguir usando el teléfono en el modo tradicional, con el teclado deslizante.
El móvil se puede personalizar y crear numerosos accesos directos y atajos para navegar por sus menús, bastante intuitivos. Es un buen producto, una auténtica joya de LG a la que sólo le podemos poner dos peros: su tecla central, que al ir a presionarla es fácil que pulses alguna de las teclas ‘escondidas’ y, sobre todo, la batería, que se consume rápidamente, sobre todo si no activas la función de ahorro de energía. Por lo demás, de lo mejorcito que ha pasado por nuestras manos, y las de nuestros amigos, este verano. – M.Moreno