La compañía israelí Lenslet ha desarrollado un procesador que en lugar
de silicio está fabricado con una solución óptica, lo que le permite
mayor velocidad y nuevas capacidades en aplicaciones militares,
multimedia o de seguridad, según ha afirmado la compañía.
El procesamiento óptico en una ventaja competitiva estratégica para naciones
y compañías, afirma Avner Halperin, vicepreseidente del negocio de
desarrollo de Lenslet. Si eres capaz de procesar a la velocidad de la
luz, conseguirás aeropuertos seguros, sistemas militares autónomos o
sistemas de comunicaciones de próxima generación avanzados.
Un procesador óptico es un procesador de seeñal digital al que se le adjunta
un acelerador óptico que le permite acelerar las funciones a velocidades
muy altas.
Esto supone un adelanto de 20 años respecto al
desarrollo de hardware digital, afirma Aviram Sariel, fundador y
director ejecutivo de la compañía.
El procesador es
capaz de ejecutar 8 billones de operaciones por segundo, equivalente a
lo que es capaz de hacer un súper ordenador, y que es 1.000 veces más
rápido que un procesador estándar. Este procesador está digrigido hacia
apliaciones como radares de alta resolución, guerra electrónica,
exploraciones de equipajes en aeropuertos, compresión de vídeo o
pronóstico del tiempo.
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