Radiactividad nivel 2 en una chatarerría de Sevilla

El suceso no ha entrañado riesgo ni para los trabajadores del centro ni para el medio ambiente puesto que la carga no llegó a abandonar el transporte en el que llegó al lugar.

Cuando el vehículo cruzó el pórtico de acceso se detectó la presencia de Cesio-137. El cálculo sitúa el nivel en 10msV (el límite anual recomendado es de 1msV). La carga llegó a Sevilla a través del puerto procedente de Kenitra (Marruecos) y por carretera a este centro adscrito al protocolo de colaboración sobre la Vigilancia Radiológica en los Materiales Metálicos, que regula cómo debe actuarse en estos casos, protocolo que se ha seguido de manera estricta por lo que se descarta la contaminación.

Se procedió a aislar el camión en un lugar apartado y comunicar el suceso a la Unidad Técnica de Protección Radiológica (UTPR) que procedió a identificar el material, aislarlo y a partir de ahí examinar el entorno para descartar la contaminación tanto en el resto del remolque, el camión y el propio centro de tratamiento de materiales.

Finalmente el responsable de que saltasen las alarmas fue un pequeño dispositivo de 13x13x13 cms y de un peso de unos 20 kilos cuya función es controlar procesos industriales. Estaba deteriorado, tenía el obturador abierto y carecía de placas de identificación. En el interior de este dispositivo estaba la fuente radiactiva, Cesio-137, con una actividad aproximada de 100 Gigabequerelios.

El pequeño pero peligroso protagonista de la noticia espera ahora que ENRESA (Empresa Nacional de Residuos Radiactivos) se haga cargo del mismo para su tratamiento especializado. ─[El Mundo]