Seis años después de su fundación, la empresa RelayRides ha decidido cambiar de marca y relanzarse como Turo. Esta compañía dedicada al alquiler de vehículos entre particulares, tiene previsto su expansión internacional más allá de EEUU, y acaba de obtener los fondos necesarios para trabajar en ello.
Con una ronda de financiación serie C de 47 millones de dólares, liderada por Kleiner Perkins Caufield & Byers, la compañía rebautizada como Turo ya ha conseguido 101 millones de dólares en financiación, y busca expandirse a otros mercados en 2016.
La empresa se basa en un sistema que permite que, tanto el dueño del coche como el que lo vaya a alquilar, puedan conocerse y evaluar el estado del vehículo antes y después del periodo de alquiler, centrándose en varios días en lugar de horas. Según la propia Turo, la media es de 5,5 días y el periodo mínimo es de 1 día.
Por ahora Turo cuenta con 110 trabajadores y su objetivo es quedarse con parte del pastel de 80.000 millones de dólares que supone el sector del alquiler de vehículos en el mundo. Por ahora la empresa no tiene beneficios, pero tras multiplicar 3,5 veces sus usuarios desde el año pasado y gracias a estos nuevos fondos, probablemente la compañía empiece a mejorar sus resultados y a ser una alternativa a las grandes multinacionales de alquiler de vehículos que trabajan con sus propias flotas.
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