Incluso en un momento en el que todas las industrias de los contenidos parecen volcadas en una lucha global contra la piratería, aparecen voces que protestan la dirección que ha tomado esta guerra. El último ha sido Mikael Held, CEO de Rovio, que aseguró en una conferencia que “la piratería no tiene por qué ser mala”.
Según Held, es necesario aprender de la industria musical y de “las formas terribles en las que intentó combatir la piratería”. La visión de Held es sencilla: la piratería puede, después de todo, significar más negocio para una compañía. “Tomamos algo de la industria musical, que fue dejar de tratar a los clientes como usuarios y empezar a tratarlos como fans“.
Una vez realizado este cambio, aseguró Held, todo es una sencilla regla de tres: “si perdemos esa base de fans, nuestro negocio está acabado, pero si podemos aumentarla, nuestro negocio crecerá”.
Eso sí, Held se refería sobre todo a la piratería de merchandising a pequeña escala (muy popular en Asia), y dejó claro que en el momento en el que esas infracciones de licencia realmente afecten al negocio de la compañía, actuarían, como recoge The Guardian. En el resto de los casos, aseguró Held, perseguir a los piratas es “inútil”.
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