Samsung presenta su smart-TV en España

Samsung es de esas compañías sin complejos a la hora de convertir a amigos en posibles enemigos. Su eterna guerra con Apple es un ejemplo: las demandas continuas no impiden que Samsung sea proveedor de pantallas para Cupertino. Así, desde la compañía surcoreana tampoco parecen creer que su Smart TV, presentada hoy en España, pueda dañar su relación con Microsoft.

¿Qué es lo que podría enfadar a Redmond de la televisión inteligente de Samsung? Muy sencillo: sus controles por gestos, a través de una cámara situada en la parte superior del marco de la televisión, recuerdan mucho al sensor de movimientos ideado por Microsoft para Kinect en la Xbox 360. Y ahora que en Redmond también han convertido a la Xbox en televisión, seguro que la propuesta de Samsung no hace mucha gracia.

A favor de cada una de las firmas juegan distintas bazas: Microsoft cuenta, de momento con bastante ventaja con respecto al resto de las smart-TVs, con contenidos, ya que ha ido logrando acuerdos con proveedores que forman ya una lista bastante larga (algo que, por ejemplo, le estaría costando a Apple). Samsung, por su parte, cuenta con las apps: al haber abierto las APIs de la tecnología, los desarrolladores pueden empezar a jugar con la plataforma y crear aplicaciones que se aprovechen de todas las características de la Smart-TV, controles por gesto y voz incluidos.

Además, Samsung tiene la ventaja extra de ser el fabricante del 90% de las pantallas OLED mundiales, por lo que en este campo juega siempre en casa y puede adelantarse a sus competidores, como recuerda The Guardian.

La familia de Smart TVs presentadas hoy por Samsung, además, cuenta con una pequeña idea extra para evitar que el hardware se quede obsoleto: además de actualizaciones de software, el usuario podrá actualizar también el hardware del dispositivo una vez al año a través de una tarjeta que aumentará la potencia.