El fabricante japonés de aparatos electrónicos Sanyo planea segregar su deficitario negocio de chips informáticos en un esfuerzo por recuperar la rentabilidad en el conjunto del grupo, según fuentes de la compañía citadas por la agencia japonesa Kyodo.
Las mismas fuentes han explicado que una de las opciones estudiadas es la de vender la unidad después de aplicar un plan de reorganización. En todo caso, está previsto que el consejo de administración de la compañía adopte decisiones sobre este asunto.
Dentro de sus esfuerzos por recuperar la rentabilidad, la compañía mantiene un acuerdo con la taiwanesa Quanta Display para desarrollar una joint venture de pantallas planas de televisión.
La segregación del negocio de semiconductores permitiría a Sanyo dar un salto cualitativo en sus planes de reestructuración y orientarse hacia la fabricación de aparatos de uso doméstico.
Por otro lado, hay que subrayar que la compañía prevé incrementar un 36 por ciento sus pérdidas durante este año, hasta 233.000 millones de yenes (1.600 millones de euros). Durante el año, la división de semiconductores generó unos ingresos de 220.000 millones de yenes (1.544 millones de euros) y mantuvo una plantilla de 13.000 personas.
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