Scott Thompson dimite como CEO de Yahoo!
El abandono del consejero delegado ha tenido que ver con las presiones sobre su curriculum falso, pero también con el hecho de que le haya sido diagnosticada una enfermedad grave.
Cuatro meses ha aguantado Scott Thompson como CEO de Yahoo!. La compañía de Internet ha difundido un comunicado este fin de semana para informar de la dimisión del ejecutivo. Ross Levinsohn, vicepresidente ejecutivo y director de Comunicaciones globales, ha sido nombrado CEO interino de manera inmediata.
Como resultado de la marcha de Thompson, Fred Amoroso será nombrado presidente de la junta de Administración. Además, Third Point gana fuelle y se asienta en la misma, con Daniel Loeb, Harry Wilson y Michael Wolf pasando a ocupar cada uno un sillón en el consejo.
El diario Times ya había adelantado que Yahoo! estaba cerca de alcanzar un acuerdo con Third Point para poner fin al conflicto de intereses en la junta. “Bajo las condiciones propuestas, el activista y gestor de fondos y dos de sus directores se sentarán en la mesa”, explicaban.
La salida de Thompson como consejero delegado llega una semana después de que se naya descubierto que había incorrecciones en la biografía del mandamás. A Thompson se le atribuía un grado en Ciencias Informáticas cuando en realidad contaba con uno en Administración. Lo que fue calificado como un error involuntario ha sido utilizado por la firma inversora Third Point (con Daniel Loeb a la cabeza) para hacer campaña contra el CEO y obligar a que se llevara a cabo una investigación para averiguar si Thompson había falseado su trayectoria.
La dimisión del CEO ha estado muy influida por las presiones recibidas por los inversores, pero ha habido otros motivos. Thompson ha informado al consejo de que se le ha diagnosticado un cáncer de tiroides, según recoge Venture Beat.
Durante su corto mandato, Thompson había anunciado una restructuración importante para centrarse en algunos productos de la casa que ha supuesto más de 2.000 despidos. El ejecutivo también ha iniciado una guerra de patentes con Facebook.