“Mano dura con la cyberjuventud” deben haber pensado en China. Al menos con los que se pasan de listos y quieren saltarse la férrea censura del régimen comunista.
Sina Weibo permite a los jóvenes chinos tener su propia red social pero siempre bajo la atenta mirada del socialismo de mercado, que traslada a las redes sociales los principios de intervención social que lleva años aplicando con éxito al desarrollo de su economía, que paulatinamente va adaptándose al capitalismo aunque siempre con supervisión gubernamental, que no se nos desmande la cosa.
A partir de esta semana, los usuarios de Sina Weibo deberán firmar un nuevo contrato por el que se adhieren a las normas de comportamiento que a partir de un saldo inicial de 80 puntos va restando conforme se produzca alguna infracción de la normativa de buenas conductas. Al llegar a agotarse el saldo, la cuenta se da de baja.
El objetivo es evitar la difusión de rumores, que se desvirtúe el orden social o que se mine la estabilidad social. Son 300 millones de usuarios los que desde esta semana van a tener que controlar lo que publican si quieren seguir formando parte de esa red social.
Ojo con estas iniciativas no sea que le dé ideas a alguien y se nos acaben los memes, los virales de gatetes, los tuits y comentarios críticos con los gobernantes, la banca y resto de instituciones y finalmente Internet tenga que cerrarse por puro aburrimiento. ─[CNN]
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