Sólo un 2,8 por ciento de los dominios .eu (un total de 9.331) solicitados por empresas e instituciones en Europa tuvieron su origen en España, según datos de EURid, el órgano comunitario encargado de supervisar esos trámites en Europa. Desde el 7 de diciembre hasta el 7 de abril de 2006, periodo establecido por la Unión Europa para el registro preferente de dominios .eu para empresas e instituciones, se solicitaron 338.033 dominios en toda Europa.
Según la firma de abogados Elzaburu, entidad reconocida como agente registrador acreditado del dominio .eu, esta situación contrasta con la de otros países como Alemania, que registró 94.137 dominios .eu (un 28,5 por ciento del total), Holanda (54.693, 16,6 por ciento), Francia (36.400, 11 por ciento) o Reino Unido (30.482, 9,2 por ciento). Italia, Suecia, Bélgica, Dinamarca o la República Checa también superan a España en este ranking.
Como es habitual en la apertura de nuevos dominios, la UE estableció un periodo prioritario (del 7 de diciembre de 2005 al 7 de abril de 2006) para que los titulares de derechos anteriores (empresas e instituciones, fundamentalmente) pudieran inscribir su dominio para evitar “abusos de terceros”. Sin embargo, estos expertos advierten de que cuatro meses después de la apertura de ese periodo preferente, “los empresarios españoles no han captado la importancia de garantizar su presencia en la red bajo el indicativo .eu, a tenor de los datos facilitados por EURid”.
Por ello, alertan de “los riesgos que corren empresas e instituciones españolas a la hora de no registrar su marca europea en Internet” ya que una vez abierto el plazo de inscripción de dominios para todos los ciudadanos de la Unión Europea, éstos pueden solicitar las direcciones de Internet europeas que deseen, y “esta situación puede ser aprovechada para burlar los derechos de propiedad de empresas e instituciones”.
De esta forma, advierten de que, “como ocurrió en los primeros años de la burbuja de Internet con el .es, muchas personas podrían apoderarse de dominios .eu de empresas e instituciones para que, en caso de que éstas soliciten recuperarlas, pedirles importantes sumas de dinero”.
Ante esta situación, EURid ofrece la posibilidad de acudir al ADR (por sus siglas en inglés, Política de Solución Alternativa de Controversias) un procedimiento alternativo frente a la vía judicial para resolver controversias en relación a nombres de dominio .eu.
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