La casa tiene poco más de 5 metros de ancho, de ahí que se llame narrow house y cuenta con 3 plantas, la primera sirve de entrada, menos mal, plaza de garaje y oficina, la segunda es la zona habitable y una biblioteca, mientras que la tercera es el estudio donde la mujer del cliente trabaja como artista.
La fachada está recubierta de cristal, lo que tiene que ser un poco agobiante, y además cuenta con un sistema de iluminación que permite mostrar varios colores por la noche. A pesar de que los dos balcones con los que cuenta no son especialmente grandes, gracias a una inteligente disposición geométrica interior la casa entera se ilumina naturalmente con la luz que llega a sus ventanas.
Lo mejor de esta fachada a lo discoteca ochentera es que no pega absolutamente nada con el resto de la calle. La casa se encuentra en la localidad de Bilzen, una pequeña ciudad al este de Bélgica donde la mayoría son pequeñas casitas antiguas.
Tiene que resultarle especialmente agradable a sus vecinos el que la fachada esté continuamente encendida por la noche, aunque me pregunto como demonios consiguen mantener limpio el cristal en verano cuando deber ser un imán para los insectos y la gente con hombreras excesivamente grandes. Sea como sea en el enlace al final podéis ver muchas fotos de esta curiosa casa.— Dani Burón [Designboom]
Los usuarios denunciaban que la compañía los había rastreado incluso cuando usaban el modo privado…
El Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial financiará aquellas iniciativas que puedan solucionar incertidumbres científicas o…
Solo en el cuarto trimestre las empresas emergentes del país han levantado 1.500 millones de…
La región tiene 13 scaleups y destaca por sus empresas emergentes de salud y agrotech.
Valencia ha atraído en el primer semestre del año 30 millones de euros de inversión…
El diario estadounidense demanda a las dos compañías tecnológicas por haber usado sus contenidos para…