Uber considera la creación de joint ventures de cara a la conducción autónoma
El debate dentro de Uber incluye una potencial asociación con un fabricante de automóviles para el desarrollo de la tecnología de vehículos autónomos.
El área de conducción autónoma de Uber es una de las divisiones más futuristas de la empresa, pero quizá por eso una de las de evolución más incierta. La compañía californiana ha recibido una oferta de un fabricante de automóviles no identificado por su negocio de autoconducción, pero esta ha sido rechazada por los directivos de Uber.
No obstante, según The Information, la propuesta ha suscitado un debate en la compañía en torno a la estrategia futura de la división. Un debate que incluye una potencial asociación con un fabricante de automóviles para el desarrollo de la tecnología de vehículos autónomos, posiblemente a través de la formación de una empresa conjunta o joint venture.
El área de autoconducción de Uber forma parte de su Advanced Technology Group, radicado en Pittsburgh y fotrmado principalmente por ex alumnos de Carnegie Mellon con investigaciones previas en el campo de la robótica y la conducción autónoma.
Hasta ahora, Uber ha buscado desarrollar su propia tecnología de autoconducción, aunque utiliza vehículos de terceros fabricantes como Volvo y Ford, junto con hardware y sensores de varios proveedores para probar sus sistemas de software.
El año pasado, se habló de que la empresa estaba en conversaciones con Fiat Chrysler Automobiles en torno a algún tipo de asociación de cara a la conducción autónoma, aunque desde entonces han pasado muchas cosas en Uber, incluyendo su batalla legal con Waymo sobre el supuesto robo de secretos industriales referidos a esta tecnología.
Sea como fuere, The Information señala que no se espera la materialización de los planes potenciales de Uber en torno a su negocio de conducción autónoma hasta que nombre a un nuevo CEO, que sustituya a Travis Kalanick, y resuelva sus problemas legales con Waymo.