Los nuevos procesadores, aunque también usan 22nm, presentan una nueva arquitectura y bastantes mejoras. Pero también tienen un inconveniente, que lamentablemente no serán compatibles a ninguna placa base actual ya que utilizarán un socket nuevo, el LGA 1150.
Los que llegarán primero serán los Core i7 e i5, con los 4770K y 4670K como mayor exponente de cada clase. El primero tendrá 4 núcleos y 8 hilos, con 8M de caché y 3,5GHz de velocidad que podrán alcanzar los 3,9GHZ con Turbo Boost. El segundo tendrá 4 núcleos e hilos, con 6M de caché y 3,4/3,8GHz.
Lo que sí tendrán en común junto con el resto de la gama Haswell es el uso de Intel HD 4600. No está claro que mejorará con respecto al HD 4000, por lo que habrá que esperar a tener más datos.
En cuanto a los i3, harán su aparición en el tercer trimestre del año, al igual que los Ivy Bridge-E que usarán el socket LGA 2011 y podrán tener hasta 8 núcleos.
Eso sí, tal como van las cosas con los ARM, lo mismo llegan antes los smartphones y tablets con 8 núcleos que los portátiles. Con tanto núcleo nuestros cacharritos van a empezar a parecer más centrales nucleares que otra cosa. ¿Veis bien el cambio de socket u os parece que no viene a cuento cuando todavía apenas ha pasado tiempo desde el último? [GSMArena]
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